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Raúl Arribas, exportero de la A.D. Alcorcón, repasa su pasado como alfarero.

Raúl Arribas llegó a la A.D. Alcorcón en la temporada 2005-06, tras una carrera plagada de éxitos en la portería del RC.D. Espanyol, en Primera División, y con nuestros vecinos del C.D. Leganés, en la categoría de plata del fútbol español, por lo que su fichaje fue de los denominados de “relumbrón” de aquella temporada.

De aquellos años como guardameta alfarero, Rául confiesa que se queda con “muchos de los compañeros con los que estuve y con la entidad, donde me retiré como profesional y donde me sentí muy bien tratado”, subraya.

Al ser preguntado por cómo hizo para estar en activo durante 20 años, Raúl afirma que la clave es “la constancia, el trabajo, ser consecuente con tu trabajo e ir pasito a pasito, que es como se tiene que ir en el fútbol. Hay que tener mucho tesón y profesionalidad. Fui un verdadero privilegiado”, apunta.

Cuando ha tenido que ofrecer algún consejo a algún joven portero, Raúl Arribas responde que “lo primero es tener condiciones, sin ello es imposible. Además es necesario mucho trabajo para que te pueda llegar la recompensa. Es una posición muy delicada, solo puede jugar uno y hay que tener mucha fuerza mental para no venirte abajo cuando no juegues. Pero si no trabajas día a día, en el momento que te llegue la oportunidad, no estarás preparado”, enfatiza.

Varios son los momentos deportivos que acuden a su memoria, aunque por encima de todos ellos destaca “el primer playoff de ascenso a 2ª División de la entidad. Lástima que no se logró ese año, cuando me retiré, pero sí el siguiente. Logramos lo que yo creo que fue el primer pasito para que el club formara la base para llegar donde está ahora, con Anquela y el grupo de jugadores que estábamos en ese momento”.

Raúl también percibe una evolución en la estructura de la entidad, desde aquellos años en los que defendió el marco alfarero: “Lógicamente, la 2ª División no tiene nada que ver con 2ªB, es otra Liga, lo que conlleva una nueva estructura y todo el trabajo que conlleva. Y se está haciendo muy bien y con mucha profesionalidad. Además, deportivamente, veo muy bien al equipo”, recalca.

Tras dejar la práctica deportiva, Raúl Arribas cambió de tercio y se decantó por la odontología, “una aventura en la que llevo 7 años y cuyo interés me viene por mi familia y mi mujer”. Así, nuestro exguardameta abrió dos clínicas de Grupo Dental Domenech, la primera en Leganés y la última, recientemente, en Alcorcón: “Qué menos que hacerlo en el lugar donde me retiré y del que guardo grandes recuerdos, para devolver a la afición alfarera todo el cariño que recibí de mi etapa como futbolista”.

Y en Clínica Dental Doménech, como destaca Arribas, “el valor añadido es un trato personalizado, con un grupo de profesionales experimentado y excelente. Van a encontrar máxima profesionalidad y máximas prestaciones. Los abonados, además, disfrutan de muy buenos descuentos, por lo que no se sentirán defraudados”, asegura.

Para concluir, Raúl quiere enviar un mensaje a la afición amarilla: “Les pido que sigan apoyando al equipo en los buenos y, sobre todo, en los malos momentos. La temporada en Segunda es muy larga y habrá momentos peores en los que la afición tiene que estar a tope. Estar aquí es maravilloso y hay una gran diferencia entre una categoría y otra”, admite con total convicción.