Triunfo para seguir soñando

Antepenúltima jornada de Liga Adelante la que enfrentó en el municipal de Santo Domingo a la Agrupación Deportiva Alcorcón y al Club Deportivo Tenerife y terminó con la victoria de los de casa por dos goles a uno. Sufrido triunfo pero merecido. Se adelantaron los alfareros por medio de David en la primera parte, anuló la ventaja Moutinho al inicio de la segunda y Máyor, a falta de diez minutos, le dio los tres puntos al Alcorcón. 

Juan Ramón López Muñiz puso de inicio el siguiente once: Dmitrovic, Nèlson, Djene, Chema Rodríguez (capitán), Carlos Bellvís, Campaña, Óscar Plano, Natxo Insa, Toribio, Razvan y David. En el banquillo esperaban su oportunidad Dani Jiménez, Rubén Sanz, Álvaro Rey, Collantes, Iribas, Máyor y Rafa Páez. 

Por su parte, el técnico tinerfeño Martí puso en iza una alineación formada por Dani Hernández, Germán, Cristian García, Vitolo, Lozano, Carlos Ruiz, Aitor Sanz, Saúl, Moutinho, Nano y Omar. 

El choque comenzó con imprecisiónes, queriendo mandar el Alcor y defendiéndose con orden el Tenerife, buscando salir a la contra y hacer daño ganando la espalda de los centrales. Lo intentaron varias veces sin éxito y superado el cuarto de hora, un balón que llega a la frontal del área es empalmado por Toribio forzando la estirada de Dani Hernández, que desvía a córner. No se habían sentado los espectadores en sus asientos cuando se bota el saque de esquina desde la derecha del ataque alfarero, el balón es peinado en el primer palo y en el segundo, completamente libre de marca, David Rodríguez muy atento la empuja a la red. 1-0 y mejor no podían empezar las cosas. 

Siguió mandando el Alcorcón después del gol. Presionando muy arriba para recuperar el balón rápido, una vez que lo tenían buscaban las bandas para colgar balones una y otra vez al corazón del área chicharrera. En este periodo del juego se mostró especialmente participativo Razvan. Suyas fueron las mejores arrancadas por el carril zurdo. Desafortundamente para los intereses locales ninguna de ellas fructificó y el resultado siguió 1-0. Mientras tanto, el Tenerife dispuso de dos ocasiones muy claras para poner la igualada en el electrónico. Ambas a remate de cabeza de Nano. La primera de ellas, casi a bocajarro. Dentro del área se plantó sólo delante de Dmitrovic pero el meta serbio, bien de reflejos y con brillantez, blocó el esférico. La segunda fue menos peligrosa aunque también bastante peligrosa. Centro por la derecha que vuelve a encontrar a Nano libre de marca en zona de remate. En esta ocasión el delantero fue menos preciso y envío el cuero fuera de los tres palos. 

Movió el banquillo Muñiz en el intermedio, dando entrada a Máyor por Natxo Insa. Había que ajustar piezas y en esas estábamos cuando Moutinho, de manera inesperada, enganchó un trallazo desde la frontal que se coló por bajo en la portería de rival. No se llevaban jugados ni cinco minutos. Igualada en el marcador, jarro de agua fría en las gradas y otra vez a empezar. Y para empezar, más cambios. Razvan deja su puesto a Álvaro Rey. Tenía que volver a encontrarse el equipo y lo hizo casi de inmediato. Pese a que el Tenerife controlaba la posesión, los delanteros alcorconeros se dejaban notar mucho más y pudieron desequilibrar la balanza en una bonita combinación entre Óscar Plano y Carlos Bellvís, incorporado en segunda línea a la jugada. Golpeó arriba pero fue un aviso. Así, con victoria mínima para los alfareros se llegó al tiempo de descanso. 

Continuó bien plantado el conjunto isleño, buscando hacer daño a la contra. Al Alcorcón, por su parte, le faltaba recuperar algunas sesaciones de la primera parte, más allá de que el dominio fuera claro. Lo intentaba con más corazón que cabeza. Podía valer pero iba a estar difícil. Además, a partir del minuto 60 el encuentro se volvió, trabado, brusco, embarullado, lo cual perjudicaba claramente los intereses del Alcor. Había comenzado el festival de tarjetas por entradas violentas y faltas tácticas. Se estaba poniendo feo el choque y daba la sensación que el equilibrio sólo podría romperse a balón parado. 

A falta de quince minutos, Campaña conectó con David Rodríguez en lo que parecía una acción casi definitiva, pero la pelota se le quedóun poco atrás al punta y no consuigió resolver. Casi a continuación, el Tenerife vuelve a hacer la que venía haciendo durante toda la tarde. Baloncito a Nano y susto por la portería de Dmitrovic. A renglón seguido, Omar de disparo cruzado que vuelve a provocar el vuelco en el corazón de todos los presentes. Pero el partido se vuelve definitivamente loco y eso beneficia claramente al Alcorcón. Se habían acabado los parones. Vovía la fluidez. Y claro, tenía que llegar. Centro de Toribio y remate certeró de Máyor en el primer palo, anticipándose a Dani Hernández en la salida. 2-1 y otra vez todo de cara. 

Se pondría la situación incluso más favorable cuando una escapada de Álvaro Rey es parada en falta por Carlos Ruiz. Al ser el último hombre, el colegiado no duda y le expulsa. Suponía la sentencia para un combativo Tenerife que ya no podría dar replica. Hubo descuento largo pero dio igual. 4 minutos que no sirvieron nada más que para certificar una nueva victoria para los de Juan Ramón López Muñiz. Una victoria importantísima para seguir soñando con meterse en esos puestos de privilegio. Ahora toca confirmarlo el domingo en Girona. De momento, 61 puntos y una semana más que siguen las opciones intactas. Y una semana más que hay que decirlo. La temporada del Alcorcón es brillantísima. Hay que disfrutar.